Seis preguntas para hacerse a la hora de elegir una centrífuga para laboratorio:
1. ¿Qué tipo de centrífuga necesitará para su aplicación? (p.ej. clínica, de mesa, piso)
2. ¿Qué capacidad necesita en su centrífuga? ¿Cuánto espacio tiene en su laboratorio para el instrumento?
3. ¿Qué velocidad y fuerza g necesita para su aplicación?
4. ¿Qué rotores hay disponibles? ¿Qué tan fáciles son para cambiar? ¿La centrífuga tiene detección automática de rotor?
5. ¿Qué características adicionales necesitará? (por ejemplo, control de temperatura, reducción de ruido)
6. ¿Se puede controlar la centrífuga de forma remota?
- Identifique el tipo de centrífuga necesaria según la aplicación (clínica, de mesa, piso).
- Considere la capacidad y el espacio disponible en su laboratorio antes de elegir una centrífuga.
- Evalúe la velocidad y la fuerza g requeridas para su aplicación específica.
- Seleccione una centrífuga con rotores adecuados y de fácil cambio, preferiblemente con detección automática de rotor.
- Busque características adicionales como control de temperatura, reducción de ruido o control remoto.
- La detección automática de desequilibrio es una inversión que previene daños costosos y garantiza seguridad.

Tip de compra para centrífugas de laboratorio
Cuando compre una centrífuga, busque un modelo con detección de desequilibrio automático que detendrá la centrífuga si se produce un desequilibrio. Si bien esta característica puede aumentar el precio de su compra inicial, le ahorrará dinero en reparaciones a largo plazo al evitar daños costosos causados por desequilibrios de muestra.
Además es importante tener en cuenta las recomendaciones para garantizar un funcionamiento seguro de las centrífugas de laboratorio. Hay medidas para tomar antes de opera, durante el uso y luego del uso de la centrífuga.
También hay una lista de errores a evitar con centrifugas, relacionados a la poca experiencia, a la no limpieza de derrames y estimación visual de volúmenes de muestra.
Comprar centrífugas de laboratorio
Preguntas frecuentes
Conclusiones sobre qué preguntar a la hora de adquirir una centrífuga
Elegir la centrífuga adecuada para su laboratorio implica considerar varios factores clave para asegurar que el equipo cumpla con las necesidades específicas de su aplicación. Al responder las seis preguntas fundamentales sobre el tipo de centrífuga, la capacidad, la velocidad, los rotores, las características adicionales y el control remoto, puede tomar una decisión informada que optimice tanto el rendimiento como la seguridad de sus procesos. Incorporar características adicionales como la detección automática de desequilibrio puede justificar una inversión inicial mayor, pero ofrece un ahorro significativo en reparaciones y mantenimiento a largo plazo. Además, seguir las recomendaciones para el uso seguro y evitar errores comunes garantiza un funcionamiento eficiente y prolonga la vida útil del equipo. En resumen, una selección cuidadosa basada en estos criterios no solo mejora la eficacia operativa, sino que también asegura la seguridad y precisión en sus resultados de laboratorio. Invertir tiempo en la elección correcta de su centrífuga es clave para el éxito y la seguridad de sus investigaciones.